Quedan sin efecto las decisiones tomadas en la primera sesión ordinaria del Consejo Estadal de Planificación y Coordinación de Políticas Públicas del estado Miranda (Ceplacopp), tras una medida de la Corte Primera de lo Contencioso Administrativo en esa entidad.
“La Corte consideró procedente el amparo cautelar solicitado por nosotros y suspende los efectos del acta de instalación de la primera sesión del Ceplacopp de fecha 13 de marzo de 2013, por haberse puesto en marcha en ausencia de la mayoría de los legisladores, alcaldes y voceros comunales”, informó la diputada del Consejo Administrativo mirandino, Aurora Morales.
El Ceplacopp es un organismo que coordina todo lo referente a las políticas realizadas en el estado Miranda, que aumentan la calidad de vida de los habitantes.
Los legisladores del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv), solicitaron el 07 de enero del presente año al gobernador Henrique Capriles, la convocatoria a la primera sesión del Ceplacopp, “y nos enteramos que luego se instaló, sin nuestra presencia”, detalló Morales.
“Aquí no hay respeto por las instituciones, nuestro deber como legisladores no solo es el de controlar y administrar los recursos de la entidad, sino también el de hacerle seguimiento a las políticas públicas y obras, por lo que nos vimos en la necesidad de entregar un amparo ante la Corte”.
Señaló que los legisladores mirandinos exigen a Capriles que se “ponga a derecho” y respete la constitución de la República Bolivariana de Venezuela, y resaltó que exigen la convocatoria a estas sesiones a los alcaldes de la entidad, presidentes de cámaras de trabajadores, directores de los Ministerios del Gobierno con sede en el estado y voceros de distintos frentes sociales.
Morales indicó que el 12 de septiembre el gobernador de la entidad convocó a una nueva sesión del Consejo. “Es una conducta permanente de irrespeto, fraude y engaño. Él se la pasa politiqueando por todo el país, por eso hoy tenemos un gran problema con los educadores del estado, él no se ocupa de sus obligaciones”.
Señaló que pese a las amenazas, los educadores hoy conocen la verdad y quieren luchar por las reivindicaciones que plasma su contrato colectivo. FIN
